Si eres mamá primeriza, probablemente ya descubriste que dormir se volvió un lujo. Y aunque tu bebé duerma mucho, pareciera que siempre lo hace cuando tú no puedes, y cuando tú puedes… él no. ¿Suena familiar?
Tranquila. Aquí te contamos cómo funciona el sueño del recién nacido, qué esperar (realmente) y cómo acompañarlo sin perder la cabeza (ni las horas de sueño).

1. ¿Cuántas horas debería dormir un recién nacido?
Durante el primer mes, un bebé puede dormir entre 14 y 17 horas al día, repartidas en siestas muy cortas. No sigue el día y la noche como nosotros: sus ciclos son más breves y su ritmo circadiano aún no se ha desarrollado.
😴 Lo normal es que se despierte cada 2 a 4 horas para comer —sí, también de madrugada.
2. ¿Por qué parece que duerme “mal”?
Porque para nosotros, dormir “bien” es dormir varias horas seguidas. Para tu bebé, el sueño es diferente:
- Tiene ciclos de 40-50 minutos.
- Se mueve mucho mientras duerme.
- Puede hacer ruiditos, quejarse o incluso abrir los ojos brevemente entre ciclos.
💡 No todo sonido o movimiento significa que está despierto o que necesita algo. A veces, solo está cambiando de fase de sueño.
3. ¿Cuándo empieza a dormir más seguido por la noche?
A partir de las 6-8 semanas muchos bebés comienzan a tener períodos más largos de sueño nocturno (unas 4-6 horas seguidas).
🌓 Para ayudarlos, puedes comenzar a marcar la diferencia entre día y noche desde temprano:
- Luz natural y actividad durante el día.
- Ambiente tranquilo, sin estímulos fuertes, por la noche.
- Prendas específicas para la hora de dormir.
4. ¿Qué es el “sueño ligero”?
Los recién nacidos pasan más tiempo en sueño ligero (activo) que profundo. Esto les ayuda a despertarse fácilmente si necesitan algo… pero también significa que se sobresaltan más fácil.
🤱 Usar una manta envolvente (swaddle) o un ruido blanco suave puede ayudar a que se sientan contenidos y duerman mejor.
5. ¿Hay que “enseñarle” a dormir?
Durante los primeros meses, lo más importante es la contención y el apego. No se trata de entrenarlo, sino de acompañarlo. A medida que crecen, se pueden establecer rutinas suaves y señales que lo ayuden a asociar el sueño con momentos de calma.
🛏️ Una rutina simple antes de dormir (baño, canción, caricias) puede ser muy efectiva a partir del segundo o tercer mes.
6. ¿Y tú… cuándo descansas?
Esta es quizás la parte más difícil: cuidar de ti misma también es prioridad. Dormir cuando el bebé duerme puede sonar cliché, pero a veces es lo único posible.
☕ Pide ayuda. Rota turnos con tu pareja. Toma siestas cortas cuando puedas. Y sobre todo, suelta la culpa de no poder con todo.
El sueño del bebé no es un problema a resolver, sino un proceso a comprender. Cada bebé tiene su ritmo, y eso está bien. Con paciencia, información y mucho amor, llegará el día en que ambos duerman mejor.
Y sí… ese día llega.
Fuentes:
- American Academy of Pediatrics (AAP). “Sleep and Your Newborn.”
- Mayo Clinic. “Infant sleep: Tips for the first year.”
- National Sleep Foundation. “How Much Sleep Do Babies and Kids Need?”
- HealthyChildren.org (AAP). “Helping Your Baby Sleep.”